Dice el presidente del Barça que él no mezcla el deporte y la política, pero que el deporte se relaciona con la política. Lo escuché en un programa de TVE. No sé como define Laporta el hecho de que su club haga propaganda a favor de la reforma del Estatut de Catalunya en un partido de la Liga española.
Claro que hace política, por ejemplo cuando en plena campaña electoral desayuna con los candidatos de determinados partidos a la presidencia de la Generalitat. Está indicándole a su masa social entre cuáles deben escoger.
En todo caso, tiene razón Laporta cuando relaciona el deporte y la política, ya lo hizo Hitler en la década de los treinta o la dictadura franquista. En democracia, el fútbol, por ejemplo, sirve para hacer más llevadera la crisis o para que los políticos distribuyan circo a las masas de parados o futuros desempleados.
Se hace política cuando se pretende potenciar el sentimiento nacional, de cualquier nación, sobre la base de los triunfos de un ciudadano o de una selección. La Copa Davis la gana la armada española, en el Tour de Francia triunfamos porque vence Contador o Sastre y la victoria de la selección española de fútbol en la Eurocopa llena de rojo toro las calles de España, hasta las de Barcelona, como se encarga de difundir TVE.
Por lo tanto, que no se corte Laporta, el pone al Barça al servicio de su ideología o sentimiento nacional como hacen otros en otras latitudes.
Laporta debe dejar de faltar al respeto al resto de seguidores del Barça que no vivimos en CataluÑa. Que piense lo que quiera pero una persona pública debe medir bien sus palabras para no herir a esos socios que no somos catalanes y también pagamos al club. Si el Barça, según él, es de catalanes y para catalanes no lo conocería nadie. Espero que no se meta a político porque buscaría imponer una dictadura porque sin duda eso es lo que se deja entrever cada vez que habla
ResponderEliminar