Ir al contenido principal

Farrah Jackson



En menos de veinticuatro horas nos han abnadonado dos iconos para los que ya hemos traspasado la barrera de los cuarenta años. De muy distinto peso y valor, pero referentes al fin y al cabo.

Comenzamos el jueves despidiendo a Farrah Fawcett-Majors, esa chica con el pelo alocado que investigaba por cuenta de alguien desconocido en la California de los setenta junto a otras dos compañeras. Era un ángel de Charlie que un día apareció presuntamente desnuda en un revista soft sobre la que Antonio Asensio construyó un grupo editorial. Digo presuntamente porque luego se demostró que era un montaje en sentido estricto: montaron la cabeza sobre el cuerpo de otra. Pero ya nos daba igual.

Luego, nuestras vidas, la de ella y las de los adolescentes que la mirábamos extasiados, se separaron; Farrah dio tumbos por películas y series menores, nosotros hicimos lo que pudimos y ahora tenemos mucho menos pelo y bastante más peso.

Pero la gran muerte es la de Michael Jackson, ese hombre de desconocido color que se ha complicado los últimos años de su vida. Se ha ido como acostumbran estos megaídolos, demasiado pronto y con dudas sobre su final. Cincuenta años son demasiados pocos para un artista del que se podían esperar más cosas si hubiera logrado enderezar su carrera.

Debe ser muy difícil conservar el sentido común cuando estás tan arriba y has ganado tanto dinero. A Jackson se le metió en la cabeza cambiar de color, a otra superestrella, Elvis Presley, regalar todo tipo de cosas y gastar dólares a espuertas; y los dos se han ido jóvenes, en ese trayecto que va de los cuarenta a los cincuenta.

Su familia estará compungida o aparentará estarlo. Quizá en algún momento se paren a pensar que el negocio continúa, ahora con más fuerza. Que le pregunten a Lisa Marie Presley, ex esposa de Jackson, lo que ingresa cada año Elvis Presley Enterprises.

Comentarios

  1. A Jackson no se le "metió en la cabeza cambiar de color". Tenía un enfermedad llamada vitíligo.

    Lo que si se le"metió en la cabeza" fue todo ese cambio físico(veamos su nariz,por ejemplo), relacionado con problemas en su infancia.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

La consulta del idioma

No hay asunto en el que la demagogia y lo políticamente correcto campeen más que en el debate sobre los idiomas y la enseñanza. Última capítulo: la encuesta de la Xunta para conocer la opinión de los padres sobre el uso del gallego en la docencia primaria y secundaria. Independientemente de los objetivos y el resultado, es loable que, por una vez, los políticos se tomen la molestia de escuchar a alguien más que a ellos mismos antes de abordar una cuestión de tanto calado. Si salieran más a menudo de las cuatro paredes del Parlamento, de las sedes de los partidos o se bajaran de los coches oficiales descubrirían que hay otro mundo de preocupaciones, temores y anhelos personales y vitales de los ciudadanos que les sorprendería. Probablemente escucharían las voces de los niños obligados a estudiar y responder en gallego aunque su idioma vehicular es el castellano, y viceversa, oirían a los padres que claman contra la permanente reforma partidista de la educación, y hasta se darían cuenta ...

Zapatero lo ha conseguido

Zapatero ha entrado en la crisis del Alakrana con un objetivo público y otro más o menos encubierto. El objetivo para consumo público es conseguir la liberación de los marineros en poder de los piratas somalíes. Obvio. Todo el mundo apoya al presidente. El objetivo encubierto es evitar el desgaste político que la nefasta gestión del secuestro del atunero está provocando a su gobierno y a él mismo. Para conseguir esto último ha seguido dos estrategias: la primera es tratar de que los medios de comunicación dejen de criticar la acción del ejecutivo y de servir de altavoz a los familiares; para ello se ha servido de una apelación a la responsabilidad de los informadores y opinadores. Malo, malo, porque cuando a un periodista le pide responsabilidad un político es que algo pretende esconder o conseguir. La segunda estrategia de Zapatero para atenuar la presión sobre el ejecutivo es convencer a los familiares de los tripulantes para que guarden un prudente silencio. Por lo visto, parece qu...

El equipo médico habitual

Hubo un tiempo en que los españoles seguíamos atentamente las informaciones que facilitaba el llamado "equipo médico habitual". Era un grupo de brillantes especialistas que trataban al por entonces Jefe del Estado, el general Francisco Franco, de las numerosas dolencias que le aquejaban y que lo llevaron a su tumba del Valle de los Caídos en noviembre de 1975. Por aquellos años yo era un ser humano a medio camino entre la niñez y la primera adolescencia, y la verdad, la retahíla de problemas de aquel señor mayor que mandaba por encima de todos me sonaban un tanto lejanos. Lo único que saqué de beneficio fueron tres días sin clase cuando se murió, que casi coincide con mi cumpleaños. Ahora esto del equipo médico habitual parece que vuelve a estar de moda. No son siempre los mismos médicos ni el paciente es tan tenebroso como aquel militarcito que secuestró el poder gracias a un golpe de estado y una guerra civil. Los problemas de salud del Rey Juan Carlos nos devuelven l...